Me gustaría obtener un arma así puedo suicidarme con eso, volarme la cabeza en mil pedazos y que crezcan rosas sin espinas en el cráneo, pintar mi cama rosa con sangre o restos de materia gris.
Manchar peluches, muñecos, colores, pasteles con mi sangre.
Y caer en coma.
Mi interior quema en cada sorbo. ¿Nunca intentaste golpear o quemar, cortar, saltar estar al borde del precipicio para sentir el golpe de aire frío en tu cara; el vértigo para sentirte vivo?
Es ese arranque de adrenalina, lo que te recuerda que aún sigues con los pies sobre la tierra y todo sigue.
La mayor parte del tiempo cuando me siento abrumado me gusta ir a lugares altos, o que algo me recuerde que sigo acá, una realidad alternativa en la que reina el caos y de la cuál quiero escapar corriendo lo más rápido que pueda, pero los pies me pesan.. entonces viene el cachetaso.
¿Qué pasa por tu cabeza ahora mismo?
Yo honestamente solo quiero leer, tener plantitas, hornear galletas.. en resumen, hagan cosas lindas por uno mismo y por los demás; por que así se olvidarán un poco de toda la mierda del mundo.
Necesito tocarte, necesito tocarte el rostro y comprobar si verdaderamente eres real o dejar pasar todo.
¿Eres real?
¿Somos reales?
Quiero dormir junto a ti, fumar contigo. Emborracharme con usted, desmayarme, volver a la vida aunque todo sea repetitivo.
Los silencios, el frío, los no-latidos, el tacto.
Oh mierda, sí que voy a extrañar todo eso.
Tanto que hacer y tan poco tiempo.
Tan pocos chances.
Pero tan largo, el olvido.
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